Que las lluvias que te mojen sean suaves y cálidas. Que el viento llegue lleno del perfume de las flores. Que los ríos te sean propicios y corran para el lado que quieras navegar. Que las nubes te cubran el sol cuando estés solo en el desierto. Que los desiertos se llenen de árboles cuando los quieras atravesar. O que encuentres esas plantas mágicas que guardan en su raíz el agua que hace falta. Que el frío y la nieve lleguen cuando estés en una cueva tibia. Que nunca te falte el fuego. Que nunca te falte el agua. Que nunca te falte el amor. Tal vez el fuego se pueda prender. Tal vez el agua pueda caer del cielo. Si te falta el amor, no hay agua ni fuego que alcancen para seguir viviendo. Autor: Gustavo Roldán (escritor argentino)
yo se que doy mucho la lata con que usemos el blog pero creo que nos iremos dando cuenta de que una herramienta como esta puede tenernos conectados cuando no nos veamos quincenalmente...